Esta semana cedemos el espacio a una carta de despedida que Isabel Mancilla (hermana e hija) nos comparte sobre su cambio de vías, ya que después de vivir dos décadas en la Ciudad de México, decidió mudarse a Guadalajara y empezar una vida distinta, con miras a reacomodar muchos asuntos en su vida, familiares, laborales, académicos… Nos enorgullece acompañarla en esta nueva etapa en una ciudad muy querida para nosotros, donde han nacido tantos proyectos y se han concretado muchos sueños. Deseamos que Isa encuentre también alegrías y caminos propios para transitar que la lleven a reencontrarse consigo misma.
Inés M. Michel.
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Hoy dejo muchas cosas atrás… más específicamente, dejo toda una vida atrás; y me aterra, incluso me dan ganas de llorar, sin parar… para ver si, así, de alguna manera el tiempo vuelve y permanezco aquí… en esta ciudad (la CDMX).
Me pone triste irme, pero me pone más triste saber que estaré mejor si me voy… es por ello que, al mismo tiempo, me siento tan aliviada, y esperanzada.
Me duele tener que dejar a mis amigos, una de las cosas que más valoro en esta vida, pero también sé que estarán conmigo, siempre; siempre presentes a pesar de la distancia.
También me duele mucho pensar en las razones que me orillaron a dejar esta vida atrás y comenzar de nuevo… las interminables peleas con mi madre, ya que lo único que hacían era escalar de nivel.
Pérdidas… constantes pérdidas… una de las más impactantes, la de mi mejor amiga; la que consideré por muchos años mi mejor amiga, mi segunda hermana.
Todo está pasando tan rápido que apenas tengo tiempo de procesar la que será mi futura realidad, la que ya es mi realidad.
Hoy así sin más me despido de una vida, de una ciudad… de una familia de sangre… y de la familia que yo escogí, me despido, por el momento, nada más… con toda la incertidumbre de lo que me espera, pero con la ilusión de una mejora incluso en la relación con mi madre.
Será un cambio radical, espero con ello que todo se reacomode.
En fin…
Que las cosas pasen y… se aclimaten; por mi parte ya di el primer paso, no sin dolor…
Y… acá estoy, en Guadalajara, para un nuevo comienzo de vías.
Isabel Mancilla.
Cuerdas Ígneas 
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