Damos al tiempo la responsabilidad de nuestra felicidad, que pase rápido para sanar las heridas, pero no tan rápido porque se va la juventud; que se detenga un poco en el umbral de la muerte porque no disfrutamos lo suficiente, porque matamos el tiempo en ocios y vicios, en nada provechoso, en la espera de tiempos mejores. Pero, ¿qué es el tiempo y en que radica su poderosa influencia hacia nosotros y nuestra vida cotidiana?