Columna invitada
Eduardo Reyes González
Es común escuchar en el discurso del gobierno federal en turno sobre los logros obtenidos en materia de generación de empleo, siendo este uno de los temas más importantes durante los tiempos electorales, por la exigencia que la ciudadanía expresa en su deseo de obtener un mejor empleo o que estos sean mejor remunerados. El gobierno lanza datos cada temporada, pero esto ya se ha vuelto un discurso como parte del espejismo gubernamental ya que actualmente se ha desprestigiado la generación de estímulos fiscales que impulsen la generación de empleo, siendo que en México las pymes y el negocio informal es lo que genera más empleo en nuestro país.
México terminó el 2020 con más de medio millón de empleos perdidos, esto a causa en su mayoría por la pandemia de COVID-19; es importante recalcar que, ante esta caída de la economía mexicana, en nuestro país no se designaron recursos, apoyos fiscales o tributarios que pudieran contener esto, como sí lo hicieron otros países.
El gobierno se jactó de que, gracias a su mandato, se recuperaron un cuarto de millón de empleos, pero por más que le miramos, no encontramos la manera de justificar que el gobierno haya sido responsable directo de esto.
En 2019, del total de recurso manejado por el gobierno mexicano, el primer destino fue para la adquisición de materiales, sueldos y salarios de la burocracia mexicana, el segundo se enmarca en la adquisición de inmuebles e intangibles, además incluye la compra de edificios terrenos, mobiliario y equipamiento, es decir que el gobierno gasta más de lo que invierte.

Entendemos que el gobierno de AMLO no quiera caer en un nuevo proceso de endeudamiento nacional, ni apoyar las finanzas de la empresa privada en México, pero tampoco podemos entender que al final se jacte de la recuperación de empleos cuando solamente fue observador de la debacle. Aparte debemos recordar la cancelación por parte del legislativo de algunos fondos, principalmente a la cultura e investigación que de alguna manera generaban empleo para un sector de la población.
Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación de Empleo de 2020, en México de los 57.6 millones de mexicanos en vida productiva, 43.1% se dedica a la prestación de servicios, 18.7% al comercio, 17% a las manufacturas, 12.9% a la producción agropecuaria y el 8.4% a la construcción; sin embargo, 31 millones de estas cifras trabajan en el comercio informal y, de lo que resta, el 91% lo representan pequeñas y medianas empresas. El gobierno federal solo le paga el sueldo a por lo menos 7 millones de personas.
Los únicos trabajos que el gobierno genera están en el ámbito burocrático y operativo, siendo en el primero donde existen 4 millones de empleados tanto en lo municipal, estatal y federal, o pertenecen a las empresas operativas gubernamentales como CFE, que tiene 90 mil empleados o PEMEX que tiene 120 mil adscritos; hay 165 mil militares, 600 mil empleados del sector salud, y en este último rubro una contratación temporal para la pandemia. Otra área en la que genera empleo el gobierno es en la educación, existen en el país 1 millón 700 mil maestros dependientes del estado; la otra parte de generación de empleos indirectos están con la inversión en obra pública, lo cual es incierto ya que mayormente estos trabajos son temporales, son subcontrataciones y, como sabemos, dependen de la obra pública insignia de cada administración, y ahí será a donde se destinen los recursos, si es que no sale algún imprevisto. En este sexenio la CFE, PEMEX, el aeropuerto, la refinería y el tren maya es donde se invierte el mayor recurso, entendiendo además que este trabajo lo están desarrollando en parte el ejército mexicano y no empresas privadas que contratan mano de obra civil.

Sabemos que en estos empleos de gobierno los cambios o contrataciones se sitúan en los puestos más altos que cambian con cada sexenio, mientras la base se queda fija dependiendo de su antigüedad, por lo que aquí no hay mucho movimiento o rotación de personal.
El lema de los partidos políticos en contienda sobre la generación de empleos es una utopía que nunca deberá ser tomada en cuenta, ya que, aunque es cierto que los representantes legislativos tienen la posibilidad de implementar e impulsar mejores reglas de competitividad, estimulación fiscal y, sobre todo, mejorar los tramites burocráticos para desarrollar empresas, esto dependerá del contexto político para que sea posible, lo que al parecer no es prioridad.
El nuevo esquema económico de nuestro gobierno, al contrario de impulsar la competencia en el país, cierra las puertas a inversiones que generan más recursos y empleos, como la inversión energética, que si se impulsara, generaría nuevos empleos y a su vez fomentaría nuevas ramas económicas. En cuanto al desarrollo del campo, hay muchos lemas políticos y no se ha solucionado el tema de la inversión necesaria, es aquí donde vemos el espejismo del impulso económico, transformado en remesas que mandan los connacionales en el extranjero, quienes mayormente abandonaron el campo al no contar con suficientes apoyos y recursos. El gobierno tiene la posibilidad en México de impulsar el desarrollo de la canasta básica y ser un país autosuficiente que no dependa de la importación de productos, pues nuestro país es vasto en recursos naturales.
El impulso de un salario mínimo más alto es bueno, representa mayor poder adquisitivo, pero si las empresas no tienen suficiente impulso económico tenderán a despedir empleados para cumplir con sus obligaciones fiscales con un menor personal; si no existe impulso al movimiento económico, cómo espera el gobierno que se puedan manejar mayores salarios, cuando además los productos se encarecen, produciendo una inflación económica.
El tema del empleo es uno de los discursos con más desgaste en la actualidad y más cuando el ciudadano común busca un nuevo trabajo y no lo encuentra, cuando pretende impulsar un negocio y la burocracia en su eterno viacrucis limita las posibilidades, cuando el gobierno limita a la inversión extranjera y existe más incertidumbre que deseo de hacer negocios.
Eduardo Reyes González.
Fuentes:
https://expansion.mx/economia/2021/01/21/mexico-termina-el-2020-con-una-tasa-de-desempleo-de-4-4
www.forbes.com.mx/economia-empleo-informal-en-mexico-crece-4-1-durante-la-pandemia/
https://www.eleconomista.com.mx/empresas/En-que-trabajan-los-mexicanos-20180806-0021.html
https://expansion.mx/mi-carrera/2013/01/14/pymes-generan-81-del-empleo-en-mexico
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-952X2011000200005
Imagen de portada: Ijeab.
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