Actuar o no actuar, ¿esa es la cuestión?

La verdadera vida comienza en el momento en

que termina la preocupación por la supervivencia,

la urgencia de la pura vida. El fin último de los

esfuerzos humanos es la inactividad”.

Byung-Chul Han. Vida contemplativa.

El más reciente libro de Byung-Chul Han, Vida contemplativa. Elogio de la inactividad, pone en el centro de la discusión, quizás, la cuestión moderna por antonomasia: la capacidad y decisión, mediante la praxis, de cambiar la historia y el mundo.

Son muchos las y los pensadores sometidos, aquí, a la criba de la crítica más radical, pero destaca el lugar que Han le da a Hannah Arendt.

Y para hacerlo, el pensador coreano trae a nuestro tiempo uno de los lemas del pensamiento clásico, el de la vida contemplativa, como la salida única ante el frenesí de las acciones transformadoras modernas, la del trabajo fundamentalmente; pero no solo.

Cabe detenerse en lo que Han nos plantea en este su último libro y tomar partido.

Bien, para hacerlo, partiré del fragmento con el que abre el capítulo inicial, denominado Consideraciones sobre la inactividad que, citando a Nietzsche, nos dice: 

“Nos estamos asemejando cada vez más a esas personas activas que <<ruedan como rueda la piedra, conforme a la estupidez de la mecánica>>. Dado que solo percibimos en términos de trabajo y de rendimiento, interpretamos la inactividad como un déficit que ha de ser remediado cuanto antes” (p. 11).

De este modo, está puesta la premisa en la que se basará el libro todo y la crítica de la filosofía de Hannah Arendt, en particular.

nuevo libro de byung chul han
Portada de ‘Vida contemplativa’ / Taurus.

¿Qué tanto se enlaza esta mirada, que es la de Byung-Chul Han, con lo que Nietzsche define como la enfermedad de la época moderna: el nihilismo?

Creo que esta pregunta es primordial y nos va a servir de guía en la lectura de este libro tan importante, políticamente hablando, en la medida en que se nos ofrece como la salida, sí, la salida a los atolladeros de nuestro tiempo.  

¿Tiene razón Byung-Chul Han?

Conviene, a partir de esta pregunta, detenerme en el lugar que ocupa el filósofo coreano en el pensamiento contemporáneo.

Cierto que es muy debatido y hay quienes lo siguen, así como quienes lo critican. Como las cosas nunca son en blanco y negro, menos en el terreno de las ideas, quiero hacer explícita mi postura acerca de tan significativo pensador.

Una exalumna me proporcionó, pienso, la mejor definición del pensador coreano; dijo que Byung-Chul Han hacía filosofía en “tiempo real”.

En su momento me pareció muy precisa la calificación, y así lo seguimos pensando, esto contra sus detractores, que no son pocos, que a veces ni siquiera se toman la molestia de leerlo.

Bien, este filósofo coreano que viene de la metalurgia y escribe en alemán, ha encontrado el modo y el estilo para colocarse como uno de los pensadores de vanguardia, en la medida en que, precisamente, para decirlo con nuestra exalumna, nos habla de las cosas que están aconteciendo, pero desde una perspectiva filosófica, es decir, crítica.

Desde sus primeros libros, pienso sobre todo en La sociedad del cansancio, quizás uno de sus libros más leídos, Han se ha posicionado contra la tendencia actual —llamada neoliberal— que todo lo centra en el individuo y en su capacidad de producir y de consumir.

libros de filosofía contemporánea
Portada de ‘La sociedad del cansancio’ / Herder.

Así, en el texto del que me ocupo, ahora, Han se deslinda del principio práctico-activista de la sociedad moderna para, así, reivindicar como más humana la capacidad contemplativa y decirnos que solamente a partir de “suspender” nuestro activismo en el mundo, es que podremos “reconciliarnos” cono nosotros mismos, con la tierra y con la naturaleza toda.

¿No es la guerra la máxima expresión de ese activismo que forzando la naturaleza de las cosas quiere imponer, precisamente, su capacidad de transformación que llega a coincidir —no casualmente, creo— con la capacidad de destrucción?

¿No es este el atolladero en el que nos encontramos actualmente?

Es esto lo que nos dice Byung-Chul Han en Vida contemplativa. Elogio de la inactividad, y es en su despliegue argumentativo que, paso a paso, se deslinda de una de las pensadoras más importantes de la filosofía política: Hanna Arendt, en la medida en que en el centro de dicha filosofía se encuentra —según la consideración de Han— la vida activa; despreciándose, de este modo, la vida contemplativa.

Han se detiene en todo esto en el penúltimo capítulo del libro, que lleva como título El pathos de la acción y en el que el pensador coreano comienza por decirnos que en la fe judía hay dos conceptos sagrados: Dios y Sabbat.

Siendo, de este modo, la inactividad como la dimensión más importante incluso de Dios.

El último libro de Byung-Chul Han, que ahora comento plantea la cuestión fundamental actual, a la que nos ha llevado esta sociedad del rendimiento, como máximo valor de la relación entre los hombres y las mujeres y, asimismo, con las demás especies con quienes convivimos en este planeta y con la naturaleza toda.

Personalmente, además de los puntos señalados por J. Ignacio Mancilla y con los que coincido totalmente, me evocó el libro de Milán Kundera, La lentitud, en el que la crítica del pensador checo se dirige a las prisas de la sociedad contemporánea, en aras de un camino rápido que a lo que nos ha llevado, es a una transformación destructiva del mundo en el que estamos y en el que nosotros mismos podemos considerarnos una especie en extinción.

libro de milan kundera
Portada de ‘La lentitud’ / TusQuets.

Me parece que el llamado de Han es hacia otra actitud, con ecos del pensamiento oriental, hacia nosotros mismos, nuestros congéneres y la vida y la naturaleza en general.

¿A dónde nos ha llevado esa producción sin sentido, ese anhelo a destajo por la acción? Al atolladero, como acertadamente dice J. Ignacio Mancilla de una forma de vida destructiva.

Por último, yo (Eunice Michel) quisiera citar el final del último capítulo de Vida contemplativa, que ilustrativamente se llama La sociedad que vendrá:

En el reino de la paz por venir se reconciliarán el ser humano y la naturaleza. El ser humano ya no será más que un conciudadano de una república de seres vivos a la cual pertenecerán las plantas, los animales, las piedras, las nubes y las estrellas(p. 120).   

 ¿Podría esto constituir la nueva utopía?

¿Seremos capaces los seres humanos, las mujeres y los hombres de ahora, todes, de jugárnosla por esa apuesta?

Dejamos, Eunice Michel y J. Ignacio Mancilla, estas dos cuestiones abiertas.

P. D.

Va la ficha completa del libro: Byung-Chul Han, Vida contemplativa. Elogio de la inactividad, Penguin Random House, Grupo Editorial, México, 2023 (traducción de Miguel Alberti).

Eunice Michel/J. Ignacio Mancilla

Guadalajara Jalisco, colonia Morelos, a 1 y 2 de marzo de 2023.


Imagen de portada: Ecosistemas Ovacen.

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